Antes y después

Tachán!!

Toque fino

Un buen pulso, nervios de acero, músculos relajados, ojo de águila y toque mágico para que la pared salga perfecta...... menos mal que estaba Scott para arreglar mis chorretones!!

Preparar antes de pintar es un rollo

Y si no que se lo digan a Paqui que se pasó horas poniendo cinta por todos los sitios.

Trabajando duro

Tempranito, a eso de las 6 am, continuamos con la pintura. Hay que tener en cuenta que la parte más dura vino antes. Primero el maldito papel endemoniado que no quería salir, luego dar de llana para que la pared quede lisita. Cuando se seca el yeso hay que pintar con lo que llaman el "primer" una lechada blanca para que la pintura final quede bien.

Pintando la cocina

La parte más pesada de pintar es prepararlo todo. Empezamos quitando el horroroso papel de la pared, lo que terminó siendo mucho más pesado de lo que pensábamos. El puñetero papel estaba muy bien pegado. Nos costó casi 5 días probando todos los sistemas. Al final con una máquina de vapor y una cuchilla y mucho curro lo quitamos todo. Después tienes que preparar toda la zona para pintar e ir pintando las esquinas antes de pillar el rodillo. Scott y Marcia nos ayudaron mucho. Primero echándome la bronca por no tener el material adecuado (por lo visto las brochas de 99 centavos no son las de mejor calidad) y después dedicando muchas horas para tener la cocina lista.